El peligro de caer siempre está cerca. Además decir cosas sobre temas fundamentales el amor, la muerte, el deseo) es andar por una fina cornisa.
Algunas de mis últimas pinturas son exageradamente románticas, simbolistas, narrativas, con reflejos ingenuos, medievalistas. Una geometría sencilla y visible, los objetos y situaciones en una caja, como en una escena de teatro.
Las imágenes están entre antiguos vapores, rozan retóricas ya usadas. Un arte de mensajes y no de efectos, de pequeñas sorpresas escondidas, una sobreabundancia de afirmaciones que necesita de la complicidad del espectador, de su militancia, de una fina observanción de las sutilezas.
Bailando en la playa 9, acrylic on canvas, 70 x 100 cm, 2014
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