Los cuadros de fiestas y bailes, escenas teatrales donde los
personajes dialogan con gestos y ademanes, en cada nuevo cuadro se fueron
reduciendo a una pequeña franja de gestos, los de la alegría.
Las risas son levemente distintas en cada personaje, pero no dejan de provocar una sensación de repetición del gesto, quizás una repetición que provoca el eco de un movimiento cinematográfico o de video. Una escena coral de risas que como suele pasar también en la realidad es una reacción en cadena.
Carcajadas, risas, sonrisas, miradas alegres y entusiasmadas. En los últimos cuadros de bañistas, los cuerpos bailan sueltos y coreográficamente acompañan a los rostros.
Como si fuera inevitable siempre reírse del mismo chiste los personajes pasan sin esfuerzo ese momento trascendente de su existencia en que son felices.
Las risas son levemente distintas en cada personaje, pero no dejan de provocar una sensación de repetición del gesto, quizás una repetición que provoca el eco de un movimiento cinematográfico o de video. Una escena coral de risas que como suele pasar también en la realidad es una reacción en cadena.
Carcajadas, risas, sonrisas, miradas alegres y entusiasmadas. En los últimos cuadros de bañistas, los cuerpos bailan sueltos y coreográficamente acompañan a los rostros.
Como si fuera inevitable siempre reírse del mismo chiste los personajes pasan sin esfuerzo ese momento trascendente de su existencia en que son felices.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario